El precio de la soja ya cayó un 23% en el año y su cotización en términos reales es igual a la de 2006
Sin intervención del Banco Central, bajó el dólar en todas sus formas. Los inversores vendieron desde bonos corporativos en dólares hasta billetes. El esfuerzo no fue gratis, porque en el Mercado Libre de Cambios (MLC) aumentó la demanda de los importadores y obligaron al Banco Central a cubrir la diferencia, pese a la normal liquidación de los exportadores, que vieron como la soja se desmoronaba casi 2% en el mercado de Chicago.
La oleaginosa acumula una baja de 23% en el año y está a USD 378 por tonelada.
Según el analista financiero y experto en agronegocios, Salvador Vitelli, “en términos reales la cotización de la soja es la misma que en 2006. El panorama no es el mejor. Por eso entre la soja de 2023/24 que resta comerciar y la que tiene precio a fijar representan 68,3% de la producción”.
En el mercado cambiario la baja de los dólares financieros se aceleró. El MEP perdió $1.296,57 (-2%). El contado con liquidación (CCL) cayó $23,72 (-1,8%) a $1.294,33.
En tanto, el “blue” perdió $20 a $1.415. La brecha entre el dólar libre y el MEP alienta al “puré” porque deja una ganancia de 10% en cada pase de manos. En otras palabras, comprar dólares en la bolsa y revenderlos en el paralelo deja una ganancia de $110 por dólar. Una oportunidad para invertir o para abaratar considerablemente los viajes al exterior.
En el MLC se operaron USD 449 millones por los pagos de energía. El Central tuvo que vender USD 124 millones a pesar de que los exportadores liquidaron USD 350 millones. Es la cuarta rueda consecutiva de ventas. Las reservas subieron 5 millones a USD 27.312 millones por la suba del oro.
El informe de la consultora F2 de Andrés Reschini señala que “en futuros se registraron ajustes en baja. Las tasas implícitas (excepto julio) tuvieron caídas, de hasta 200 puntos básicos para desde noviembre hasta marzo 2025 a partir desde donde se mantuvieron relativamente estables. Pero los rendimientos de LECAPS cayeron aún más y la distancia entre ambas curvas vuelve a ensancharse en favor de los futuros. El mercado apuesta por una baja en la inflación y busca rendimientos positivos en LECAP”.
Las dudas respecto a las reservas están golpeando a los bonos soberanos a pesar del mejor clima de negocios de Estados Unidos donde los inversores piensan que en la reunión que comienza hoy de la Reserva Federal o en la próxima de septiembre se recortarán las tasas.
Los bonos tuvieron un día irregular donde se mezclaron alzas y bajas en los bonos más representativos. El riesgo país bajó apenas 9 unidades (-0,6%) a 1.553 puntos básicos y fue por mérito de la caída de los bonos del Tesoro de Estados Unidos. Solo el blanqueo los puede sacar de su letargo.
Los títulos en pesos tuvieron caídas fuertes en los indexados por CER que llegaron a perder 3%. La baja de la inflación es la que más alegra a los inversores. Los atados al dólar (dollar linked) también soportaron fuertes caídas al igual que los duales.
El interés por los bonos a tasa fija como las LECAP hizo que suban de precio y sus rendimientos bajen desde setiembre en adelante a 3,7%. La idea de que fueran una guía de tasas del mercado despareció porque el rendimiento pasó a ser más bajo del que se pagó en la licitación. Hoy ninguna LECAP rinde 4,50% efectivo mensual.
La Bolsa tuvo otra rueda decepcionante, acompañando al panorama de cautela de los inversores. El índice S&P Merval de las líderes bajó 3,9% en pesos y 2,2% en dólares. Todas las caídas superaron 3% y los más castigados fueron YPF y Ternium con más de 5%.
En los ADR -certificados de tenencia de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- predominaron los rojos. Los grandes perdedores fueron las petroleras y Loma Negra con bajas superiores a 3%.
El mercado no parece querer salir de su quietud hasta que no vea la operación de REPO, blanqueo o salida del cepo.